Otro ejemplo de transición entre la vivienda autóctona y la casa noble con aire de pazo. Construida en los años 20 por D. Ramón Iglesias Pérez.

Al igual que muchos de los promotores, D. Ramón eligió el emplazamiento de su vivienda indiana, de gran carga decorativa en la fachada principal, al lado de la carretera general. 

En la primera planta, tres ventanas dan acceso a un balcón corrido, que ocupa la longitud total de la fachada, soportado por cuatro hermosas  ménsulas y finalizado con una fina reja de hierro  profusamente decorada. El balcón es normalmente el lugar noble del edificio por lo que los propietarios se esmeran más en su decoración. Se convierte así en uno de los componentes que marcan el gusto y la posición económica de los promotores.

Coronando el edificio sobresale una  peineta  semicircular en la que se abre un balcón de igual gusto que el anterior y sobre la que se dispone un adorno con motivos vegetales. Es frecuente la utilización de molduras para la decoración de  frisos, frontones y  recercados de las ventanas. Sobre el  acroterio o  sotabanco que esconde el tejado se disponen figuras de jarrón a modo de  pináculos contribuyendo a otorgarle un aire de distinción a la vivienda.